Besugo al horno en compañía de un Gran Reserva
- Cocina: 30 minutos
- Cocina: 15 minutos
- Raciones: 2
- Dificultad: Fácil
Decía Julio Camba que “el besugo siempre ha sido el más madrileño de todos los pescados de mar”.
Se introduce en la capital en el siglo XVIII y era el pescado de los más ricos, mientras que los pobres optaban por el bacalao.
Su época perfecta va de noviembre a Enero, no es barato, pero adelantarse a los precios y congelar es una buena elección.
Muy sabroso, considerado como símbolo de elegancia, fácil para quitar sus espinas, acepta multitud de elaboraciones.
Os dejo la receta:
Ingredientes:
1 Besugo (abierto a la espalda)
5 Patatas
1 Cebolla
2 Dientes de ajo
8 Chalotas
1 Onza de mantequilla
1 Copa de vino tinto
Ramas de cilantro y eneldo fresco
Sal y pimienta
Elaboración:
Es muy sencilla, para que no paséis mucho tiempo en la cocina
Precalentamos el horno
Pelamos y cortamos las patatas de forma panadera en la mandolina junto con la cebolla y ponemos a pochar en aceite de girasol (no tenemos que hacerlas de todo, que luego van al horno)
Para las chalotas, ponemos una onza de mantequilla en una sartén, las doramos e introducimos en una olla con vino tinto, hasta que evapore
El besugo lo rociamos en un poco de aceite de oliva, salpimentamos y en el interior (esto es opcional) ponemos cilantro fresco picado y eneldo. Unas rajas de limón y lo cerramos
Lo ponemos en la cama de patatas y cebolla al horno entre 15-20 minutos a 180 grados (depende del tamaño del pescado)
Emplatamos y abrimos una botella de Viña Albina Gran Reserva de Bodegas Riojanas. Este es el vino que os recomendamos desde “De las cosas del comer” para vuestras fiestas navideñas. Sólo el diseño de la botella ya te decora una mesa y además es una apuesta segura para los amantes del vino con la que no fallaréis.
Es en su mayoría un Tempranillo: una expresión del terroir. 80% Tempranillo, 15% Mazuelo, 5% Graciano.
Un vino elegante como nuestro besugo, muy cuidado, perfecto para estos días.