La apertura de “ El Estudio” de Santceloni

Tras 9 meses de reforma, el restaurante Santceloni, ubicado en el hotel Hesperia Madrid, se transforma por completo. Pensando en una nueva experiencia para el comensal, ha llevado a cabo una estrategia de cambio que comenzó en el propio restaurante abriendo la cocina a sala el pasado mes de agosto. En una segunda fase de la reforma, se ha reubicado la bodega integrándola y abriéndola a la sala e incorporando el Travel Wine Experience. Y en una fase final se ha ampliado el espacio creando El Estudio. Una zona anexa a la cocina, abierta con una cristalera y donde el producto de la cocina de Óscar Velasco está a la vista. Un lugar donde el comensal puede vivir parte de la experiencia de Santceloni.

Culmina el proceso de remodelación de Santceloni con la apertura de “El Estudio”

Esta reforma es el resultado de un cambio de planteamiento global en la experiencia del restaurante tras cumplir 15 años en 2016 y 9 meses de reforma. Santceloni conecta más que nunca sus tres pilares: cocina, sala y bodega. O lo que es lo mismo, Óscar Velasco, Abel Valverde y David Robledo.

Una experiencia que se plantea única para cada comensal. Sin guiones establecidos y en la que el propio cliente es quien marca las pautas. Un cambio radical que modifica la experiencia en sala y que ofrece a los comensales la posibilidad de visitar o no El Estudio y de decidir en qué momento de la experiencia hacerlo.

En definitiva, mayor interacción con el comensal, nueva experiencia, diferentes espacios, mayor peso en sala y acercamiento de la bodega.

El Estudio de Santceloni es un nuevo espacio anexo y abierto a través de un ventanal a la cocina

Una experiencia sin guion, única para cada comensal

Ninguna experiencia será igual. Dirigido por Abel Valverde, Jefe de Sala de Santceloni, es el cliente el que decide si quiere o no acceder a El Estudio y si prefiere hacerlo al principio, durante el menú o al final del mismo.

Aquellos comensales que decidan visitar este nuevo espacio son acompañados por una persona del equipo de Santceloni que desde sala y atravesando la cocina, le llevarán hasta El Estudio.

¿Qué es El Estudio?

El Estudio es un nuevo espacio anexo y abierto a través de un ventanal a la cocina. Un lugar donde el comensal va a vivir una parte de la experiencia de Santceloni y donde el producto de temporada en el que se basa la cocina del restaurante está a la vista.

En El Estudio el equipo de Santceloni quiere que el comensal entienda la cocina del restaurante, viva en primera persona el trabajo de cocina y sienta, huela y vea los productos con los que trabajan. Que se traslade al lugar donde surge todo, al origen de la cocina de Óscar Velasco.

Cuenta con capacidad para 10 comensales, techo de madera y una zona dedicada al huerto de Santceloni donde se exponen hierbas y verduras. Además de un expositor de especias, cámaras refrigeradas donde se muestra el producto de temporada y una vitrina dedicada a los quesos. Se completa con una cocina doméstica poder trabajar.

 En definitiva, la esencia de Santceloni a la vista del comensal, sin filtros, sin ocultar nada.

Por primera vez la cocina de Santceloni se abre al comensal.

 Un viaje a través de los vinos

La bodega, que lidera el sumiller David Robledo, también forma parte de esta nueva experiencia. Se reubica dentro de la sala dándole un mayor peso y abriéndola a los comensales. Dos zonas, una para tintos y otra para blancos entre las que se puede acceder al reservado del restaurante.

Además, Santceloni propone ahora el Travel Wine Experience. Un carrito compuesto por vinos internacionales y nacionales que permite al comensal recorrer el mundo a través de ellos. A todos los clientes se les entregará un Pasaporte donde el sumiller anota el vino que consume y lo marca con un sello del país de procedencia y que el comensal pueden ir completándolo en cada una de sus visitas.

Este carrito transporta toda la experiencia vinícola de Santceloni. Diseñado por Gabriel Corchero Studio recrea los carros con equipaje que se veían en las estaciones de trenes del siglo pasado. Está compuesto por un mueble-baúl contenedor de copas y utensilios para el vino y otro destinado al almacenamiento de botellas, ambos transportados en un carro. Cuenta con un enfriador con capacidad para albergar entre 10 y 14 botellas aproximadamente y una caja para guardar las cartas de vino.