Receta casera: San Jacobos
- Cocina: 20 minutos
- Cocina: 5 minutos
- Raciones: 6 raciones
- Dificultad: Fácil
Esta es una de esas recetas que evoca a mi infancia. Mi madre la utilizaba para que comiéramos carne, casi sin darnos cuenta y olvidando la típica frase “se me ha hecho bola”.
Esta es una receta muy antigua de la que cuentan tiene su origen en el Camino de Santiago, a los cansados y hambrientos peregrinos se les ofrecía para reponer fuerzas. El nombre de San Jacobo al parecer le llega cuando introducen cerdo entre el jamón el queso, para testimoniar que eran cristianos y no judíos, ni musulmanes. San Jacobo dedico su vida a expulsar y cortar cabezas a los musulmanes.
Esta receta tiene primos y hermanos. En Francia es el Cordon Bleu y en nuestro país, los escalopes Viena, los flamenquines cordobeses y el cachopo asturiano tan en boga últimamente.
Sea como fuera, en mi casa era la receta socorrida de mi madre para escondernos la carne. Los San Jacobos pueden ir sólo con queso y jamón, con carne de pollo, de cerdo o de ternera.
Os dejo la receta:
Ingredientes:
6 Escalopes de ternera
12 Lonchas de queso para fundir
12 Lonchas de Jamón de York
Harina
Huevo
Pan rallado
Sal
Aceite de Oliva suave
Elaboración:
La receta no puede ser más sencilla.
A los escalopes los ablando con el martillo de cocina y les quito los nervios y la grasa, los voy colocando entre dos lonchas de queso y dos de jamón de York, como si fuera un libro.
Paso por harina, huevo y pan rallado y coloco en la sartén con aceite de oliva suave, para que no les quite sabor.
Una receta de toda la vida, que en casa nos encanta. Podéis acompañarlos de unas patatas fritas o una ensalada.