Recetas

Una excepcional lubina en tierra adentro

  • Dificultad: Fácil

Desafiando al tremendo calor cumplimos, un año más, mi familia y yo con todo un placentero ritual veraniego, visitar a nuestros grandes amigos, la familia Sanz, propietaria de la cada vez más consolidada y valorada bodega “Dehesa de los Canónigos” y preparar un plato que degustamos en armonía con sus grandes vinos como el Solideo o una de las últimas elaboraciones, un blanco de uva albillo que como todo lo que hace esta ejemplar y querida familia atesora una enorme calidad.

En esta ocasión preparamos una excepcional lubina de Aquanaria (www.aquanaria.com) que ya tuve la ocasión de probar cuando asistí a presentar el congreso Orígenes que tuvo lugar el Pasado Mayo en Las Palmas de Gran Canaria. Llevan más de dos décadas dedicándose a la acuicultura y han conseguido posicionarse en los mejores restaurantes de España y incluso exportar a 22 países, siempre bajo el estigma de la calidad y la sostenibilidad. Se trata de lubinas que se crían en granjas marinas ubicadas a escasas millas de la costa de Gran Canaria bajo estrictos controles de sanitarios y de seguridad.  Lubinas que nacen en cautividad y desde que pesan 80 gramos se crían en el mar bajo una perfecta observancia y cuidados alimentarios. Extraordinario producto que os recomiendo encarecidamente.

La lubina la preparamos al horno y para que todo tuviera sabor canario, las acompañamos de unas patatas con distintos mojos recién traídos también de las islas afortunadas. Iván Sanz nos obsequió de aperitivo con unos excelentes carabineros, plenos de textura y sabor, y unas nécoras no menos sabrosas.

Y así, en tierras vallisoletanas, pudimos refrescarnos con producto excelso de nuestros mares y nuestras brisas. Eso sí, siempre reconfortados con la hospitalidad y el cariño de una familia de vino y de bien, que desde hace tiempo considerados como propia.

Deja un comentario